El Dragoneante
El término DRAGONEANTE, con el que se identifica a los alumnos y alumnas de la Escuela de Suboficiales, tiene un origen etimológico, desde el punto de vista de la historia militar, en dos acepciones:
DRAGÓN: Es el Soldado que hace el servicio de infante y jinete, es decir, es un hombre de armas que tiene la capacidad de combatir a pie o a caballo.
DRAGONES: En el año 1554, el mariscal francés Carlos I de Cossé-Brisaac, creó un cuerpo de Arcabuceros que combatía a pie y se desplazaba a caballo, para servir en el Ejército del Piamonte. Desde entonces se comenzó a emplear el término Dragón/es. Si bien el origen de este término es incierto, se cree que puede aludir a los dragones de uno de los estandartes de las tropas de Brisaac, o bien a un mosquete corto o carabina llamado así en aquel tiempo.
En el siglo XIX, las unidades de Dragones tenían gran presencia en la mayoría de los ejércitos europeos, adecuados a las distintas especialidades de cada Ejército en los diferentes países.
En el continente americano, el término dragoneante se relaciona con el verbo “dragonear”. Se entiende como aquel militar que desempeñaba una obligación o función para su mando, sin contar aún con un título para hacerlo. Además, los soldados podían ocupar un cargo accidentalmente y de esta misma forma, llegar a desempeñar las funciones de un superior inmediato.
Teniendo en cuenta su origen etimológico y su adaptación en nuestro continente, podemos asegurar que el significado coincide con las funciones y valores que se le inculcan a nuestros alumnos, donde se les motiva a generar competencias y capacidades que les permitan resolver problemas de la panorámica actual y futura, actuando siempre como militares íntegros y multifuncionales.